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Enfemera de la Universidad del Rosario de Bogotá-Colombia-Abogada de la Universidad Nacional de Colombia. Con formación postgradual en Gerencia de la Salud Pública,Instituciones Jurídico Laborales , Políticas Sociales con Enfasis en Salud y Docencia. He sido profesora de Etica y Bioética, FORMACION POLITICA en universidades como: Fundación Universitaria del Area Andina en Bogotá-Colombia; y me desempeñè como Enfermera HUS de Bogotá ; Conferencista en las áreas de Responsabilidad profesional, políticas de Salud y enfermería, Etica y Bioética, Derechos fundamentales, en especial derechos de los niños y niñas. Expresidenta del Consejo Técnico Nacional de Enfermería CTNE -período 2008-2010. Fui hasta el año 2015 miembro de la Asociación Nacional de Enfermeras de Colombia ANEC.

viernes, 4 de marzo de 2016

LA NATURALEZA -EL ENTORNO- COMO SUJETO DE CUIDADO


PAISAJE NARIÑENSE:"DONDE EL VERDE ES DE TODOS LOS COLORES"
“El cuidado de la vida tiene que ver con la creación de un pensamiento terapéutico que ayude a paliar la carencia de sentido de la vida” Dario Botero.

En Colombia , la Ley 266 de 1996 o ley que regula el ejercicio de la profesión de enfermería establece al entorno - entiéndase aquí- la Naturaleza como sujeto de cuidado, exigiendo su pleno respeto y la obligación de cuidarla con principios como la  dialogicidad, integralidad, individualidad, continuidad, calidad y, con  competencia.(art 3o)
En  estas líneas de reflexión - donde se  el ambiente hospitalario que es el que más conozco- el entorno constituye todo un sistema de elementos abióticos, bióticos , organizacionales y socio económicos con que interactuamos en el cuidado.
Al posicionar al entorno no como objeto sino como sujeto de cuidado, en esa aparente, leve diferencia, la Ley 266/96 hace que finalmente  sea reconocido como parte integral de  la vida y salud, le visibiliza confiriéndole vida legal que no le había reconocido la profesión desde que Florance Nightingale lo estableciera como elemento fundamental y base de la enfermería.
El entorno como sujeto de cuidado constituye primero, un nuevo paradigma explicativo (o si se quiere mejor una nueva cosmovisión) del propósito y fin de la profesión y, segundo: visibiliza el carácter del cuidado en la producción y reproducción de vida y salud. Un ejemplo para sustentar esto nos lo dá Nightingale en sus notas sobre enfermería al señalar la primera regla de enfermería: “mantener el aire que respira tan puro como el aire de fuera, sin que el paciente se resfríe”, en el mejor entendido de hoy ,  que este aire ,metafóricamente hablando, sintetiza un ambiente que debe valer la pena respirarse ,porque se ha cuidado previamente todas las dimensiones ambientales.
Desde otro ángulo, situar como sujeto de cuidado al entorno, significa valorar la concepción de alteridad en él. Es decir, reconocer que es “un otro”, y como tal tiene su sabiduría, organización,  cultura, un comportamiento, otra forma de pensar, sentir, ser, y por tanto debe ser respetado y cuidado.
Su cuidado implica responsabilidades profesionales, y deberes éticos.
Al respecto,  Nightingale hacía el llamado a la inteligencia y participación de enfermería sobre lo básico de un entorno sano: la necesidad de ventilación, calefacción, manejo del ruido, de los olores, de los residuos y excretas, la luz, la limpieza, etc, etc. Tendríamos que hacer, por tanto, una objeción a la profesión hoy : ¿Cuál es nuestra participación en el diseño, planificación y organización de la estructura, infraestructura de los espacios para el cuidado? ¿Por qué permitimos el hacinamiento en espacios como urgencias, unidades, consultorios, pasillos etc? ¿Documentamos los trastornos de visión, sueño, ruido, en situaciones donde solo existe luz artificial, sótanos, etc , etc? ¿Cumplimos con reportar las condiciones para el cuidado que nos exige la Ley 911 de 2004?¿Integramos en toda la formación del profesional la enseñanza del medio ambiente?
Así visto , el entorno hospitalario, el hábitat de las personas, los lugares de la comunidad: escuela, parques, ríos, montañas, fauna,  y toda la gama de naturaleza, que constituye sujeto de cuidado,   no puede continuar percibiéndose como un telón de fondo donde no aparecen los seres humanos;  donde el entorno es considerado un objeto que utilizamos para nuestro provecho; debemos hacer conciencia que como sujeto  merece todo nuestro respeto, obligación y compromiso , exigiéndonos que olvidemos la forma insular de cuidar solo a las personas y, para lo cual  debemos integrar en nuestros procesos y planes de cuidados al ambiente como un sujeto con espacio propio.
La profesión también cuenta hoy con teoristas que de verdad aportan a esta mirada de cuidado y de nuevos sujetos; está por ejemplo Martha Rogers y la teoría del cuidado de los seres humanos unitarios, una propuesta de reconstrucción mental y social que plantea valores y principios capaces de reconducir a un mundo que ha perdido la cordura hacia caminos de vida  y salud, especialmente para quienes más sufren los efectos de un mundo desigual.  
La concepción del entorno como sujeto de cuidado debe llevarnos al re-encantamiento del cuidado de enfermería, tan necesario hoy en la profesión y la sociedad.